En el año 1955, el gran maestro del suspense, Alfred Hitchcock, decidió llevar su extraordinario talento a la pequeña pantalla. A petición de la productora MCA, creó, supervisó, e incluso dirigió 22 de los episodios de una serie de intriga y misterio, que habría de sentar cátedra en la TV. : "Alfred Hitchcock.. presenta".
En ella, el director británico presentaba y despedía cada episodio, siempre en la clave de humor negro y sutíl ironía que lo caracterizaba, contribuyendo decisivamente al gran éxito popular que adquirió el programa. Su emisión se emitió hasta 1962, produciéndose 266 episodios de 30 minutos, para posteriormente, pasar a llamarse "La Hora de Alfred Hitchcock", al prolongar la duración de los capítulos. Ésta vez, serán 99 episodios, los que se verían por la cadena CBS, hasta 1965.
Otro de los ingredientes de la serie era la magnífica contribución aportada por talentos de primera fila, cómo Bette Davis, Peter Lorre, Joseph Cotten, Joanne Woodward, James Coburn, Robert Redford o Vera Miles, en el apartado interpretativo, Robert Allman, David Friedkin, o Sidney Pollack, como directores aún por consagrar, o grandes guionistas cómo Ray Bradbury, o Arthur Ross.
¿Y quién no recuerda la famosa melodía que sonaba en la introducción del programa?
("Marcha fúnebre para una marioneta", compuesta por Charles Gounod), elegida por el propio creador.
En 1985, y ya cómo homenaje póstumo al genial director, se produjo un "remake" de la serie, coloreándose los episodios originales y las apariciones de su presentador, de nuevo con gran éxito.
En definitiva, una serie que marcaría un "antes", y un "después", en la televisión.